Caja Laboral cayó en su visita a la cancha de Montepaschi Siena (85-74) en el último partido de la primera vuelta del Top 16 de Euroliga, en el que se ha visto superado por los quince triples anotados por el equipo italiano.
El equipo vasco no superó la decepción copera y acabó sucumbiendo a un Montepaschi que se mostró muy superior en la segunda mitad. Tras una primera parte en la que el Caja Laboral trató de 'tú a tú' al siempre complicado conjunto italiano, los de Luca Banchi desplegaron su mejor versión en el tercer cuarto, donde obtuvieron una renta suficiente para llegar vivos al final del partido.
Los de Zan Tabak tenían que ser capaces de superar el mal trago de la Copa en una cancha donde solo el Barcelona Regal pudo salir vivo en esta ronda. Conociendo el nivel del rival, colíder del Grupo F y uno de los candidatos para hacerse con el trofeo continental, el Caja Laboral quiso salir muy concentrado al partido desde los primeros compases.
El estadounidense Bobby Brown, jugador más valorado de la competición, comenzó muy rápido a hacer de las suyas y finalizó el primer parcial como máximo anotador de su equipo. Sin embargo, el conjunto vasco defendió y atacó con solidez y remontó un parcial en contra de 5-0 para ponerse un punto por delante antes del segundo acto.
El siguiente parcial no pudo estar más igualado. El equipo vitoriano, con la mente completamente puesta en la Euroliga, continuó cuajando un gran partido y frenó bien la apuesta ofensiva del reciente campeón de la Copa italiana. Heurtel y Cook estuvieron algo desaparecidos en la primera mitad y fueron San Emeterio y Lampe quienes tiraron del carro del conjunto vasco, que llegó al descanso dos puntos arriba (35-37).
La euforia del Caja Laboral fue a menos cuando el Montepaschi Siena comenzó a desplegar su superioridad en el segundo acto. Brown y Janning, con un 75% de acierto en tiros de tres, lideraron a un grupo que no quería dejar escapar una nueva victoria en el 'Top 16'.
Con un parcial de 13-4, el tiempo muerto solicitado por Tabak no sirvió para hacer reaccionar a un equipo al que no le estaban saliendo bien las cosas en el tercer parcial. El resultado de 61-50 ponía las cosas muy difíciles para los visitantes, que tendrían que apelar a la heroica en el juego definitivo.
Dispuesto a no tirar la toalla hasta el final, el Caja Laboral se encomendó a Nemanja Bjelica para intentar lograr la machada. Sin embargo, el guión del conjunto de la Toscana cambió muy poco y, por medio de Hackett, continuó asediando al cuadro visitante.
Aunque el Caja Laboral despertó y mejoró su acierto, la renta obtenida por el Montespaschi en el tercer cuarto acabó por decidir el partido. Con este resultado, el cuadro vitoriano tendrá que hacer bien los deberes en la segunda vuelta si quiere hacerse con un hueco en los cuartos de final.
